Mucha gente se hace la misma pregunta cuando ve un Kamado por primera vez: «¿pero eso qué es exactamente?». Pues bien, el Kamado es un horno cerámico que tiene su origen en ollas primitivas de arcilla y barro utilizadas hace más de 3.000 años en China, llegando incluso a los 4.000 años en la India. Sin embargo, la palabra Kamado (かまど) es japonesa y significa «horno». En Sugarra lo utilizamos para cocinar la carne a la brasa desde hace tiempo.
En la India, evolucionó en el hoy famoso horno Tandoor y en Japón hace 2.500 años, en el Mushikamado (utilizado en la cocción del arroz). Este último era una olla con forma esférica, con una cúpula desmontable, utilizada principalmente en el sur del país nipón. Inicialmente estaba compuesto de barro y al contener pequeñas cantidades de azufre se dilataba y podía llegar a agrietarse a altas temperaturas.
Tras terminar la Segunda Guerra Mundial, los estadounidenses se fijaron en en el Kamado (fue concretamente Ed Fisher, estando destinado allí) y entre 1950 y 1970 lo importaron y adaptaron hasta el modelo que tenemos hoy en día, sustituyendo el barro por cerámica para poder alcanzar altas temperaturas sin problema.
Hoy en día la mayoría de Kamados se componen de cerámica y materiales refractarios, así como de rejillas de ventilación que hacen la función de tiros ajustables, pudiendo controlar así la intensidad de las brasas y la temperatura. Podríamos decir que son la unión perfecta entre tradición milenaria e innovación y pueden utilizarse como hornos, ahumadores, parrillas…son un todoterreno.
En Sugarra tenemos dos Kamados construidos con materiales de primera, para aguantar más de 400ºC. Nuestro principal objetivo es aportar un sellado perfecto y un profundo sabor a brasa a la carne, verdura y marisco de una forma mucho más intensa que con la típica parrilla vasca.
Domo arigato Japón! (& USA)
